Humano, ¿has escuchado decir:"¡El diablo me obligó a hacerlo!?" Voy a contarte un pequeño secreto celestial: ¡Lo hizo!
Lucifer comenzó una guerra en el cielo y los caídos cambiamos nuestra salvación por la condenación para probar un punto. De una forma u otra, hemos estado entre bastidores ayudando a la humanidad a tomar algunas decisiones cuestionables, algunas violentas, otras simplemente malas. ¡Oh!, esto no te absuelve de tu mal comportamiento. Nosotros sólo damos empujoncitos, pequeños jalones, tú eres quien toma la decisión. Has escuchado hablar del libre albedrío, ¿verdad?
Incluso los caídos tienen libre albedrío, a pesar de haber pasado todos estos siglos en la Tierra.
Puedes llamarnos ángeles caídos, demonios, diablos, vigilantes, poco importa. Esta es mi historia, humano. Yo soy Tristan. Me enamoré de un ángel. Me enamoré de una humana. Me enamoré de un ideal.
Cuando me asignan a Kasia, ya me siento cansado de la destrucción de la humanidad, pero dejar la Organización no es tan fácil como parece. Acepto el caso, pero hay algo sobre mi nuevo encargo.
¿Puedo cambiar? ¿Hay esperanza para un alma condenada? ¿Puede la inquietud que siento en mis huesos cambiar mi punto de vista?